En 2013, las exportaciones han crecido más de un 24% respecto al año anterior. La demanda de aceite de oliva es mayor que la producción nacional.
El aceite de oliva constituye supone una de las señas de identidad de la cocina tradicional libanesa, una de las más famosas del mundo, y está presente en la mayor parte de sus platos. Los últimos datos señalan que el sector se encuentra en plena forma: en el último año, las exportaciones de ‘oro líquido’ libanés han crecido un 24,2% respecto al curso de 2012 (más de 4.000 toneladas), mientras que el valor de las ventas al exterior ha repuntado un 25,5%.