El Vino son miles de matices de la tierra, sol alumbrando su color, esencias, sabores, la recompensa de una cosecha. Embaucado en madera o simplemente vestido de platino, es majestuoso, un arte realzando la tierra. Arte de muchos artes, tradición, pasión, invadiendo nuestros paladares. El vino te hace cerrar los ojos, para contemplar los sentidos. Fundirse en unos labios, con su sabor y olor, dejar huella instigadora, triunfando por su esencia.
© Mar Galván